miércoles, 4 de febrero de 2015

La Bola del Mundo

Los cohetes de Tintín



La Bola en invierno de 2014.


La Bola del Mundo es una de las montañas más emblemáticas de la Sierra de Guadarrama su altitud es de 2265 metros y se encuentra en la divisoria entre las provincias de Madrid y Segovia. Su nombre real es: Alto de las Guarramillas, aunque su etimología no está muy clara lo que si sabemos es que allá por el siglo XIV en el Libro de la Montería del rey Alfonso XI, al referirse a esta zona de la sierra, menciona las Guadarramiellas como puntos donde situar a los ojeadores para la caza del oso.

La ruta comienza en el parking del Puerto de Navacerrada que está a unos 1850 metros de altitud, la ruta de hoy es fácil, muy facil, es una excursión tranquila y sencilla. No sé si hay datos del número de visitas que recibe esta montaña, pero debe ser enorme. Se puede ascender por muchos sitios.

Lo  normal es tomar la pista de cemento que sale del Puerto. Los más perezosos pueden subir en el telesilla que sigue una pista de esquí a la que llaman la pala de montañeros y tomar un refresco en el bar que hay en la caseta del remonte cerca de la imagen de La Virgen de las Nieves, aqui ya estaremos en la primera Guarramilla a unos 2.180 metros de altitud.  

Un poco más arriba, siguiendo la pista de cemento hay otro roquedal a unos 2.210 metros que sería la segunda Guarramilla y en la que se ubica una cruz metálica.


La pista de cemento llega hasta la cima.

Seguimos la carretera de cemento hacia la tercera Guarramilla que es la más alta con 2.262 metros y coincide con el lugar donde está el repetidor de radio y televisón con las famosas antenas de rayas rojas y blancas, por su forma recuerdan mucho al cohete que utilizó Tintín en sus aventuras por la Luna. Para salvaguardar la seguridad y el bienestar de los trabajadores y teniendo en cuenta que la nieve los puede dejar aislados dos o tres días, el repetidor fue construido como si se tratara de una base polar de tal manera que pueda soportar las embestidas de los temporales en invierno y la fuerza de los vientos.

 
La Bola desde el Cerro de Valdemartín.


Si nos apetece prolongar un poco más la excursión podemos ir hasta la cuarta y última  Guarramilla, a unos 300 metros al noreste de las antenas, está entre el Ventisquero de la Condesa y las pistas de Vadesquí, a 2.246 metros de altitud.

A la izquierda La Bola, en el centro el Ventisquero de la Condesa
y el Cerro de Valdemartín a la derecha.

Son muy pocos los montañeros que conocieron la cima sin las antenas, hoy en día la denominación de Alto de las Guarramillas prácticamente no se utiliza, lo más normal es llamar a esta montaña La Bola del Mundo o simplemente La Bola, no sé muy bien el porqué de este asunto, pero se cree que el origen del nombre viene de las primeras emisiones televisivas en las que se podía ver el globo terráqueo con una antena emitiendo ondas circulares, esta imagen se asoció con el repetidor del Alto de las Guarramillas hasta el punto de popularizarse el nombre de Bola del Mundo.


Las antenas.


Yo creo que los 'cohetes' ya pertenecen a estos parajes de la sierra de hecho cuando las condiciones de visibilidad son malas, siempre ayudan a orientarse y han evitado la perdida de más de un montañero.

Por otra parte es muy triste ver lo degradada que está la zona. El abandono de los remontes de la estación de esquí del Puerto de Nacerrada, en la cara norte de La Bola le dan un aspecto lamentable al paisaje. Por suerte en la vertiente sur (Ventisquero de la Condesa) y suroeste (Ventisquero de la Estrada) la cosa cambia y todo parece estar mucho más limpio.

Como dije al principio es una excursión para no complicarse, perfecta para ir con niños, sin nieve y con buen tiempo no hace falta ir bien equipado y pienso que es una buena ruta para no perder la forma física.


domingo, 31 de agosto de 2014

Portilla del Rey


En un rincón de Gredos

Hoy toca hablar de una interesante excursión en la Sierra de Gredos, se trata de una ruta poco transitada y que si os atrevéis con ella os sorprenderá por la fuerza de sus paisajes.




Calzada del Puerto de Candeleda.

El punto de partida es La Plataforma de Hoyos del Espino (1780m). Comenzamos a caminar más o menos a las ocho de la mañana, por suerte hace un día espléndido, sol radiante y cielo despejado, si lo que buscas es lucir un bronceado perfecto hoy es tu día, además advierto que en este recorrido no vas a encontrar la sombra de ningún árbol. 


 
En el centro de la imagen el Morezón.

Si eliges hacer este itinerario durante el mes de junio no tendrás problemas para llenar tu cantimplora,  estamos en pleno deshielo. Además 2013 fue un buen año de nieves y las fuentes de los Cabadores y de los Barrerones funcionaban a pleno caudal. 

Empezamos la ruta tomando la calzada del Puerto de Candeleda que está al final de La Plataforma. Esta calzada, que muchos dicen que es del tiempo de los romanos, es realmente una vía pecuaria que se sigue utilizando como paso natural para llevar los ganados en invierno a tierras más cálidas en busca de pastos, en resumen, un camino antiquísimo.


El Prado de las Pozas.

Al poco tiempo del inicio nos encontramos el cartel que indica la dirección a la Laguna Grande, 2 Horas y 45 minutos, pues bien ese es el camino que tomamos. El siguiente punto de referencia será el puente del Prado de Las Pozas, lo cruzamos y empieza la subida hacia Los Barrerones, antes pasaremos por la Fuente de los Cabadores. Vale la pena parar un ratito en el alto de Los Barrerones (2032m) y contemplar  el Circo de Gredos,  he pasado muchas veces por este lugar y aun así me sigue sorprendiendo su grandeza.



El Circo de Gredos visto desde Los Barrerones.


Comenzamos la bajada hacia la Laguna Grande y a nuestra derecha ya vemos a lo lejos La Portilla del Rey, nuestro objetivo. Antes de llegar a la Laguna Grande un cartel nos indica el camino hacia El Circo de Las Cinco Lagunas, giramos a la derecha para ir buscando el paso natural que nos lleva a la Majada del Gargantón y así bordear el cordal que cierra el Circo de Gredos por el Oeste. 


Una vez cruzada la Laguna Grande vamos hacia el Gagantón.

Iremos ganando altura y cruzaremos el Gargantón - su nombre lo dice todo - es un antiguo glaciar en el que solamente los muy osados se atreven a adentrarse y que hoy se presenta repleto de torrentes precipitándose por ese granito pulido por los hielos del Cuternario, tan común en gran parte de la Cordillera Central.


El Gargantón.

El Risco Negro, los Cuchillares del Cerro de los Huertos y La Galana presiden el entorno salvaje de la Majada del Gargantón, nosotros seguimos el camino y buscamos la trocha que serpentea por las laderas Orientales del Cordal del Cervunal. 



La Portilla del Rey.
El Circo de Las Cinco Lagunas.

Se nota el cansancio y es buen momento para reponer fuerzas, ahora nos espera una buena subida hasta La Portilla pero el objetivo está cerca y queda poco para llegar. Una vez el lo alto y después de más o menos seis horas de ruta, la vistas al Circo de las Cinco Lagunas nos reconfortan y nos dejan muy buen recuerdo de este rincón de Gredos.

lunes, 12 de mayo de 2014

Peñalara

Madre salvaje

Peñalara en diciembre de 2012.



Hoy hablaré de la que considero mi montaña, fue una de mis primeras ascensiones a una cima de estas dimensiones (2428 metros sobre el nivel del mar) y hoy en día ya he perdido la cuenta de las veces que estado en su cumbre.

Decía Reinhold Messner que las montañas son simples formaciones geológicas y que somos las personas las que las dotamos de sentimientos. Creo que esta frase es un gran verdad, pero cuando hablo de una montaña necesito personificarla, decir que Peñalara siempre se ha portado bien conmigo es dotar de compasión a esta enorme mole de granito, pero es que no encuentro otra forma de expresar mi respeto a este bello lugar.

En esta zona del Guadarrama he pasado muy buenos ratos y de paso también me he llevado algún pequeño susto. Caminando por sus laderas aprendí la crueldad y fiereza del viento del Norte en los temporales de invierno, aprendí a diferenciar los tipos de nieve y lo más importante, aprendí, entre otras muchas cosas que la humildad en la montaña es el mejor seguro.




La Laguna Grande vista desde el corredor central de Dos Hermanas.


Corredor central de Dos Hermanas.


En sus rocas he aprendido mucho de lo poco que sé de alpinismo y mucha gente opina que es una buena escuela para iniciarse en el dominio de las técnicas necesarias para moverse con soltura en el monte, yo comparto esa opinión, y por lo visto, miles de personas que se acercan los fines de semana y cuando la meteorología es buena. Uno de los inconvenientes de ir un sábado o un domingo es precisamente la gran cantidad de gente que elige este Parque Natural como lugar de ocio y recreo. 



La Sureste clásica a finales del invierno de 2013.

Peñalara desde junio de 2013 forma parte del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares en zona A-1 Reserva Natural Integral, anteriormente Parque Natural de la Cumbre, Circo y Lagunas de Peñalara.


Peñalara vista desde Las Guarramillas.

En este macizo montañoso hay de todo para iniciarse en los deportes de montaña. Hacer la ruta circular al Circo de Peñalara, hacer esquí de travesía en sus laderas, subir a su cima por las zetas, practicar el alpinismo por sus corredores, escalar o simplemente pasear por sus bosques son algunas de las actividades de las que podremos disfrutar en esta zona de la cordillera Central, pero siempre respetando el entorno para que siga transmitiendo esa sensación de permanencia. 

lunes, 28 de abril de 2014

Cabezas de Hierro


El centro del central


Desde el parking del Puerto de Cotos, ya vemos la cara Norte de Cabezas de Hierro la ruta de hoy no es de las más fáciles pero se encuentra en uno de los entornos más bellos de la sierra, es de larga duración y tanto en la subida como en la bajada hay que ir muy atentos. 
Ruta circular, entretenida, variada y que recomiendo hacer siempre con buen tiempo. Bueno claro está que en invierno es un itinerario muy serio y hay que ir bien equipado para el alpinismo invernal y muy motivado. 

Croquis de la ruta, puntos rojos para la subida, azules para la bajada.
Cabezas de Hierro a finales del invierno vistas desde 
el macizo de Peñalara.


Empezamos la caminata desde el Puerto de Cotos, tomamos la carretera de Valdesquí y en el sentido de la marcha a la izquierda encontramos una barrera y un pequeño aparcamiento que es el que nos lleva a el refugio del Pingarrón, seguimos el sendero que ahora baja hacia el Arroyo de las Guarramillas, lo cruzamos por el puente de madera y giramos a la izquierda seguimos el agradable camino entre grandes pinos y en un rato vemos que se Bifurca, pues bien, otra vez a la izquierda y ya sin problemas bajamos a el Arroyo de las Cerradillas, lo cruzamos y nos adentramos en el bosque, siempre subiendo, en esta zona se pierden los hitos, además el espesor del pinar hace que nos desorientemos un poco, pero no hay problema, siempre adelante y subiendo. Pronto desaparecen los pinos y aunque no hay una senda clara ante nosotros se presenta una gran pedrera jalonada por dos grandes roquedales también conocidos como Los Pulmones, estamos en la parte más dura de la jornada y este es lugar que elijo para beber y alimentarme.




Buena parte de la ruta discurre entre pinares.
En el centro Cabeza de Hierro menor 2376m.


El entorno es salvaje y duro y la subida transcurre por un canchal de grandes bloques de granito en el que hay que mirar bien donde pisamos así que nos podemos imaginar el ambiente de alta montaña que nos rodea, además hay que tener en cuenta que Cabeza de Hierro Mayor con sus 2387m, es la segunda cumbre en altitud de La Sierra de Guadarrama, a buen ritmo en poco más de una hora pisaremos su cima.


Pedreras y roquedales de Los Pulmones.




Para la bajada hay que estar dispuestos a poner a prueba nuestras rodillas. Abandonamos la cima y dejamos a nuestra izquierda la Cabeza de Hierro Menor (2376m), la pendiente nos lleva al lado de un torrente que va a parar a uno de los arroyos que cruzamos al principio y en el que es fácil perder los hitos, a nuestra derecha queda el inmenso canchal del Circo de las Cerradillas, en un rato llegaremos al bosque y aunque en general el camino es cómodo hay que cruzar tres arroyos en los que hay que tener cuidado con los resbalones, por lo demás y una vez superadas las dificultades lo que nos queda es una senda con poco desnivel que nos llevará de regreso al refugio del Pingarrón y luego a el Puerto de Cotos donde daremos por concluida la ruta.





La Buitrera

Entre hayedos solitarios

Después de aparcar el coche en el Puerto de la Quesera bajamos más o menos unos 200 o 300 metros por la carretera de Majaelrayo (SG-114) e iniciamos la subida por un sendero con muchas piedras sueltas y con bastante pendiente, al final de este sendero ya podemos ver las cumbres a donde nos dirigimos y observamos en primer plano los roquedales de La Peña de la Silla y al fondo El Parrejón, El Cervunalillo y La Buitrera. 

El terreno ahora resulta muy cómodo, el camino se hace fácil y los senderos están bien marcados a pesar de no haber apenas hitos y ningún tipo de cartel informativo, todo ello  hace que estos lugares sigan teniendo ese toque salvaje que tanto gusta a los aficionados a la montaña. La soledad siempre está presente por estos andurriales,  y a pesar de ser sábado me encontré a muy poca gente.

Peña de la Silla 1935m.
Los colores de la primavera en la Sierra de Ayllón.
El Alto del Parrejón 2017m.


Acabamos de pasar por el Collado de las Lagunas y fijamos nuestra vista en el Parrejón, nos acompaña el verde rabioso de las hayas y el magenta de los brezos en flor, el camino sigue siendo muy sencillo, abierto y agradable. Estamos ya en la cima del Parrejón, este monte no tiene vértice geodésico pero está coronado por un majano de lajas de pizarra que nos recuerda la arquitectura de los pueblos negros de Guadalajara, ahora dirijo mis pasos al Noroeste y dejando al Este El Alto del Cervunalillo sigo haciendo camino, en otra ocasión subiré a su cima de 2018 m. Hoy toca llegar a La Buitrera, conforme avanzo ya puedo divisar las dos caras del cordal y se puede ver El Hayedo de La Tejera Negra en tierras arriacenses.



El hayedo de La Tejera Negra.
Restos de antiguos glaciares en la vertientes del Norte y Noreste, llegar 
desde este punto a el hayedo de La Tejera Negra  parece imposible.


Seguimos haciendo la Cuerda de las Berceras que es como denominan los mapas a la zona que hoy recorremos ya estamos pisando las crestas, resaltes y algunos pequeños cuchillares pizarrosos que nos llevan a la cima. La vista de la cara noreste del Cervunalillo es muy vertiginosa, llegar desde aquí a la Tejera Negra parece imposible, pero bueno ya estamos llegando a la cumbre y las vistas me gustan bastante, ha sido una pena lo de estos cielos tan brumosos, pero bueno, ya se sabe que el día perfecto no existe.


La Sierra de Ayllón en su extremo septentrional la forman pizarras paleozoicas, los materiales son prácticamente los mismos que los del pico Ocejón, esto se ve claramente cuando llegamos a la cima.

El itinerario llega a su ecuador. Está claro que me lo he tomado con calma, paradas para beber, picar algo, bocata de atún con tomate en la cima y fotos. Desde aquí arriba y mirando hacia el Oeste contemplo el majestuoso vuelo de los buitres, Riofrío de Riaza y su embalse, y algo más lejos La Pinilla.

No recuerdo cuanto tiempo me ha llevado el recorrido de ida pero a la vuelta cuando llegué al aparcamiento el cronómetro marcaba algo más de 6 horas, en general ha sido un buen día de montaña bailando con buitres en estos hayedos tan solitarios.


domingo, 27 de abril de 2014

El Ocejón

Desde Valverde de los Arroyos


En Valverde de los Arroyos comenzamos la subida. 

En el Oriente del Sistema Central se encuentra el Ocejón. Siempre me gustó esta montaña y me sigue gustando. Su perfil viniendo desde Guadalajara, es decir desde el Sur, en dirección a los pueblos negros, poco antes de llegar a Tamajón, es mucho más estilizado que si lo miras desde Majalrrayo o Campillo de Ranas, observando este pico desde estas dos poblaciones su perfil es más piramidal y en Valverde de los Arroyos nos muestra un perfil amesetado, es en dicho pueblo donde empieza esta ruta que en mi opinión, es la opción más interesante para ascender a este monte.


El Ocejón visto desde Campillo de Ranas.
Las Chorreras de Despeñalagua.
Al fondo Somosierra y el Pico del Lobo.

Es bueno dar algunos datos para cultivar y engrandecer eso que algunos llaman conocimiento y que por desgracia es realmente un simple saber libresco que enriquece y da erudición pero poco más, bueno pues, si no recuerdo mal el monte Ocejón tiene más o menos 2049 m.s.n.m, es el dosmil más oriental de la Cordillera Central. Los materiales más abundantes en las rocas de la zona son el cuarzo y la pizarra, bueno yo creo que con estos sencillos datos ya estamos apañados. 


Las nubes acarician la cima del Ocejón. En la foto
de abajo vemos el sendero que nos lleva a la cima.


Los caminos estaban difíciles por causa de las lluvias y algunas zonas se convirtieron en pequeñas torrenteras. Para circular por estos senderos y en esas condiciones son necesarias unas buenas botas de montaña y que no se mojen mucho por que en la cumbre nos espera una nieve recién caída, fresca y húmeda, esto hace que no sea necesario el uso de crampones y piolet , que con hielo y nieve dura en condiciones invernales serian absolutamente imprescindibles. El día fue casi perfecto, la atmósfera estaba limpia y se podían ver con gran claridad muchas montañas, algunas de ellas muy alejadas, al Este el Alto Rey, al Norte y muy a lo lejos El Moncayo y al Oeste El Pico del Lobo y La Buitrera entre otras. Realmente la ascensión al pico que nos ocupa se podría catalogar de muy fácil, la duración del trayecto de ida sería de dos horas y media o tres horas, para la vuelta lógicamente emplearemos menos tiempo. 

Solamente en la parte final, poco antes de la cumbre, se complica un poco el asunto pero en ningún momento es necesario usar las manos para progresar, si las condiciones meteorológicas son buenas no hace falta un equipamiento especial y en general está bastante claro el recorrido.Visitar esta zona es muy recomendable, los pueblos de la arquitectura negra en la provincia de Guadalajara son un rincón de Castilla que sin duda sorprenderán a más de uno y por El Ocejón no os preocupéis seguirá en su puesto vigilante, esperando sentir vuestros pies.


El Pico del Lobo


Entre las dos Castillas

Desde la base de la Pinilla 1600 m.
Un par de fotos de Las Peñuelas.


Esta vez voy a describir el ascenso a esta cumbre desde dos sitios diferentes, una de las rutas comienza en el Puerto de la Quesera y la otra en la estación de esquí de La Pinilla. Las dos son muy fáciles, pues bien. Ruta desde el Puerto de la Quesera: Una vez remontado el collado de San Benito desaparece el bosque, el terreno es cómodo en general, pero en el principio de la subida  hay muchas piedras sueltas que dificultan el ascenso y lo hacen menos agradable. Estamos ya con la vista puesta en el puertecillo de Las Peñuelas y poco a poco llegaremos a sus 2211 metros y desde allí a la cima, el poco desnivel y lo bien marcada que está la senda harán que la travesía sea muy suave. Una vez en la cumbre disfrutaremos de una buena vista de la Meseta Norte y los días de mucha claridad contemplaremos un buen trozo de la geografía peninsular, al Noreste Los Picos de Urbión, más  a lo lejos El Moncayo, girando la mirada un poquito al Norte la Sierra de La Demanda y muy alejado, casi imperceptible y afinando mucho la vista por el Noroeste la Cordillera Cantábrica, es decir el trozo de planeta al que se refería el maestro Machado en estos versos:



Veréis llanuras bélicas y páramos de asceta
—no fue por estos campos el bíblico jardín—:
son tierras para el águila, un trozo de planeta
por donde cruza errante la sombra de Caín.


Corredores de la cara Norte.
Portillo del Lobo.
Al Este de la cima, el solitario Valle de los Cantos.


Croquis de la ruta de la cara Norte.
Lo peor de estos parajes y de esta ruta son las ruinas del viejo remonte de la estación de esquí de La Pinilla, realmente es deprimente ver lo mucho que afean el paisaje estos restos y lo más vergonzoso es que nadie se hace responsable de su retirada, en fin, estamos en un país en el que somos demasiado tolerantes con estos temas.

Ruta desde La Pinilla: El lugar que hemos elegido hoy para subir a la cumbre del Lobo es algo parecido a un parque de aventuras, parque temático o parque deportivo, bueno podemos llamarlo de muchas formas, en realidad estamos en una estación de montaña y es sobre todo el esquí alpino el deporte que más rentable hace el uso de estas laderas de la Sierra de Ayllón.



El valle del Silencio y el Cerrón.
Un día perfecto para la práctica del esquí.

Deportes como la bicicleta de montaña, el esquí, el senderismo y el alpinismo atraen a muchos aficionados. Por otra parte hay que decir que los remontes de la estación de esquí los podemos ver funcionando fuera de la temporada invernal en diferentes periodos del año.

La ruta a seguir tiene un desnivel importante, comienza en el amplio parking de La Pinilla, que según las curvas de nivel de mi mapa se encuentra entre los 1500 - 1600m. 

Nos dirigimos a la zona urbanizada y comenzamos a subir por una calle asfaltada que nos lleva directamente a la pista de El Bosque, no tiene pérdida, solo hay que seguir los pilares del telesilla y al final de la misma llegamos al Gran Plató 1800m, seguidamente tomamos la pista de El Mirador, pronto notamos su gran pendiente, poco antes de que la pista acabe, salimos de esta y unos 200 metros antes de la caseta del telesilla giramos a nuestra izquierda y después de pasar un pequeño canchal  iniciamos el ascenso del corredor. A la derecha veremos los cuchillares del Alto de las Mesas a nuestra izquierda las crestas y roquedales de la Buitrera de los Lobos y en el centro el fin del corredor, que nos lleva al Portillo del Lobo 2180 metros. Desde este punto y mirando al Sur comenzamos a tomar aliento y sentimos las soledades del Valle del Silencio, este valle en ningún mapa aparece con ese nombre, ni con otro y me temo que esta toponimia se la debemos a algún montañero anónimo. Bueno seguimos ya por la ancha senda del portillo, giramos un poco a la izquierda, es decir al Este y en poco tiempo llegamos a la cima pero antes y pensando en una futura excursión daremos un vistazo a el Cerrón que es otro de los dosmiles clásicos de estas sierras, pero eso ya es otra historia.